I
Hay momentos en que te sientes una auténtica mierda pisoteada por fantoches en terno
o un ferrocarril abandonado, en que ves luces pero ninguna es blanca, todas son amarillas,
color vómito de estrellas y alfileres clavados en la lengua.
II
Hay momentos en que dejas un poema colocarse la escopeta en la boca
o un nombre de flor en el cuello y cuando está a punto de tergiversar el gatillo
con una frase de estaño y soma,
darte cuenta de lo malo que es,
del prisma cambiante en que puedes llegar a mirar las cosas.
III
Hay momentos en que eres tú el de neologismos en las venas.
IV
Y, colofonizando en derredor, me siento mierda y más mierda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario