Disculpa por planear dulces porvenires, por soñar con un nosotros, por volar junto a ti; yo sólo quería llenar las páginas de tu libro, aquel libro que llevas a todos lados; yo sólo quería desatar el nudo en tu melena, Karenina ¿Que lo arregle, mi amada? Podría; pero no es amor cuando alguien sobra, pero no es amor cuando te sientes insegura. ¿Que lo que necesitas es un invierno para olvidar? Yo seré todas tus estaciones, mi Julieta, pero no lo quieres así. ¿Que quieres que todo continúe igual? Mi corazón desgraciadamente no me lo permite, cornocopia. Disculpa, disculpa nebulosa mía por hacer de tu vida una enredada lana dorada, disculpa, disculpa por fallar en mi intento de hacerte feliz.

"La felicidad suprema es tener la convicción de que nos aman por lo que somos, o mejor dicho, a pesar de lo que somos" Víctor Hugo

No bajes la cabeza princesa, que la corona se te cae...

El cielo está harapiento por tus sollozos, a aquella nube la veo desgastada,
¿lo ves? Éso pasa por confundir el significado de ser amada.
Te aferraste a sólo una estrella sin ver las infinitas constelaciones,
quisiste estar colgada de un columpio sin cuerdas, quisiste nadar en un estanque sin agua.
Tú sólo necesitabas amor, lástima que te tocó uno oxidado.
Y aquí estoy yo, tal vez no mucho, tal vez nada; vine a quitarte las espinas, a sanar tus heridas.
Seré esa razón que necesitas, esa protección que anhelas, ese amor con que siempre sueñas.

Cada loco tiene su propia utopía, su propio mundo lleno de alegría

Te tuve en mis sueños, pasé tiempo contigo allí,
en una inocente fantasía; dos personas jugueteando con el amor entre sus manos entrelazadas,
dándose tiernas miradas, intercambiando besos de almidón y palabras en papel, ¡ah! palabras inolvidables.
Dos amantes debajo de un árbol, proclamando su amor tan correspondido, tan ideal. Tan perfecto, sin defectos.
Todo parecía un sueño, y en efecto lo era.