miércoles, 8 de mayo de 2013

Y las cuatro estaciones juntas

Hipnotizar el rinoceronte, planear contento sobre un bosque de plantas nucleares,
fumarte el rascacielos limeño más grande, rascar la arena hasta llegar al Tártaro,
ver cómo tu perro levanta la oreja y se persigue la cola sin saber que alrededor todo se quema,
que nos estamos muriendo, ver una foto a través del espejo
y no a ti, intentar sacarle la raíz poética a Vallejo, pegarte a los horarios,
empujar en la entrada, presionar el botón, poner la tarjeta, una jungla en el tren,
exámenes donde vomitas memorismo, travestismo y extrañeza universitaria,
bibliotecas marchitas y folios sangrantes, cinta adhesiva en los pies del conejo,
no, dudar de todo, polaroids, pasquines rojos y hoces cayendo en el abismo perpetuo,
quinceañeros llorándole a las espinillas,
heroísmo tímido
pero heroísmo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario