lunes, 27 de enero de 2014

Una protesta al sol

Tú esperas en algún peldaño
del alba muda y el taciturno calmar
en la congruencia de los siempres
o la incólume acidez de estos días
empapado de barniz y promesas
gris augurio de tierras planas
me atas a un faro que destile astillas
igual a nuestras invenciones

basta argüir

en aras de la discordia y el pecho
para yo retozar envuelto
en mantas de rostros líquidos
y dilucidarte igual a un canario
decirte ve ve ve
vid de vuelco y vapuleos
y no mover ni una pestaña
que te quiero
no me vaya a desatar

basta gemir
basta mentir
en homenaje
de las torres
y las bombardas.

De tortugas

Cuál es la necesidad
de ganarle a las tortugas

digo, ¿hay alguien que
no se haya enamorado
de sus mordidas lentas
y los tríos verdes
que se esfuerzan
en medio de los parques,
pequeñas
y frías voyeristas,

o de las arrugas deliberadas
que tintan lo que nunca supo
bajo sus antiquísimos mosaicos?

domingo, 26 de enero de 2014

Adónde

Alza el borrador
restriega
            restriega
                         restriega
y pregunta
¿adónde van las palabras?

And a gothic roof

De pronto toses
y el mundo ya es un cuervo
o el cielo marginado
está esprintando sobre las flores
sin soplarlas
mientras el papa vuela
above the holy spirit
y la carroña de su prole
cae por los edificios
descansados, sin jaula al fin.

Buried alive

Buried alive
o de cómo
los pájaros
dejaron sus silbidos
y entramaron
un corazón de ramajes
para sabernos
la rosa que nunca
arrancaron,
nunca.

martes, 21 de enero de 2014

Solfeo de hímenes en quiebra

Niñez de lolipops
algodones 
extáticos 
llenos de madres y padres 
y tíos y abuelos 
y colibrís, joder, 
pensabas que Bataille 
era un osillo de felpa
la niñez más sombrera y Varsovia
que alguien haya tenido

Dieciséis años de trafalgares 
fueron rieles 
y se reían las rieles 
con corona de virrey aterrado 
gemía mandamientos 
no aprendías nada 
si no se trataba de quemar Biblias 
con el más delgado papel 
que hacía recordar
a la trompeta
del juicio final 

Fue allí cuando apareció Francovsky 
y sus embolias fueron mi mate 
sus sequías mis norias
sus talones mis fieltros 
sus causas mis efectos 
sus suicidios mis naceres 
sus carreras mis morfeos 
sus palabras
mi agonía. 

Desde allí nada ha cambiado. 

A menos que él lo diga.

sábado, 18 de enero de 2014

Humor

Odio a Chaplin.
Lo odio.
Y a todo deliberado
buenmozo desgarbado y cristiano actor
también, aunque no sé si quepa.
Los odio, también.
Propongo una solución.
En aras de la nostalgia robiespérrica
sobre la que erigen sus putiferias,
que no se diga más: armad la guillotina.

Mitades y mitades

¿Existían estereotipos tan pétreos el siglo pasado? Digo, desde que surgió esta idea del puente flojo que es la adolescencia, en los cincuentas, o sesentas. Hoy me siento acribillado por tantas personas aterradoramente iguales. Llamadme adolescentucho cínico, pero, joder, es que son iguales. Y la televisión los alimenta. Yo los he dividido en tres estratos en un infame y mugroso podio. No diré cuáles, dadlo por sentado, omnipresentes nadierías: contentaos con que ponga el punto final que tanto Dios codicia. Pero los he dividido, qué clasista de mi parte, qué competidor. Y quería enumerar todo; un decálogo de ojos rotos. Dado el cáncer de posterioridad culposa que estoy experimentando, dejaré que mis entrañas se oreen en la más nereida de las bahías. Engullid.

De gerundios y derivas

Disfrazado de un hediondo entrometido
que hurga en lo más espantoso del amor
nos imaginé desperdigando
este puñado de tugurios
   riendo bajo nuestra propia cimarronería
   de hecatombes urbanas
   o rascacielos resfriados subiendo
   hasta llegar al más lascivo de los empates
nos imaginé perdidos
en las nervaduras del insomnio
   malnaciendo nortes
   cogiendo olas con el pulgar
aunque no esté seguro
podría esbozar que nos vi
   puliéndole las garras a la discordia
   tras sublimarnos ante ella
   o pisando acueductos
   solo para ver llorar corales
diré también aunque divague
que estábamos allí
en la troya ardiente de verano
   decimonónicamente listos
   besando la vid mausoleica
   como quien se persigna
   ante el irónico cadáver púrpura
   del sepulturero
   o recogiendo los estambres
   que olvidó Klimt
   mientras nuestras cejas se disputan
   la más ególatra de las comillas.

jueves, 16 de enero de 2014

Rolocondros

Nos teñimos de enero, mi amor, mi Franco: los tajos en nuestra desnudez se lo adjudican con recelosos a las desvariadas carreteras. Entreverados, siempre, cae bien; heterogéneos, diría yo. Pasar un día junto a ti es como mezclar en un lienzo los pinceles transgresores de Schiele con los del más cálido y floripondio Klimt., o, joder, una orgía con Bataille, Vallejo, el Vallejo de Medellín y el más tierno Tólstoi. Nos teñimos de enero, te digo, y eso significa salpicaduras por doquier, indecorosas montañas rusas y rolocondros, rolocondros up there on the bridge, no me olvidaré. 

Why not ever before?

Up on the bridge 
you kiss me 
and who needs
a perfectly built 
first-world wooden 
paradise 
who.

jueves, 9 de enero de 2014

Vrebedad con uve de verbo

La vida no me transcurre
ni me abanica con gafas de concha
me arrastra por las sucias azoteas
de techo falso con poemas escritos
en las marcas que dejaron
los pies de los suicidas
me sulfura
rompe el mío coxis
no me sobrevive
me tira
no
me ira.

Cómo

Y sentía tus manos dardas y certeras
te construía un rascacielos
solo para trepar las cuerdas
y pegarle un tiro a las nubes
hasta tallar tu nombre
donde Dios nunca llegó
Tristan Tzara ya lo dijo:
    cuando mi alma pretende
    perderse en la noche
    solamente tu recuerdo la detiene
    con invisibles dedos de espectro
pero tú persistes estocado
te espasmas
en la bucle del laberinto
pequeño eres cabaña eres
y cómo te gusta horquillar
los angustiosos signos de interrogación
cómo te gusta
fusilar las incongruencias cómo
cómo no abrazas nada cómo
cómo desnutres
todo lo que alguna vez supe cómo
Francovsky
cómo

haces que el amor luzca como una pelusilla.

domingo, 5 de enero de 2014

Larra

Larra, liana mía, lirio mío, lascivo enrredo, doble respingar, que calce con tu nombre. Larra, milonga de sábados, chascas tu lengua, tu dedo meñique recorre la taza de café marcada por tus labios, lila. Me magullo cada que lo haces. Liviana, pajarilla, te levantas del piso cuando canta la Buena Vista Social Club, bolerito, murmullo radiofónico. Tin-ti-ne-as. Das pequeñísimas cabriolas y todos te juran áurea y flotante, de helio. Yo le doy vueltas a la sala firmando en cada oreja que eres mí-a, Larra, mientras oscilas con tu whisky on the rocks. Vas acercándote a mí, o me parece, con los largos dedos confabulados en un signo como de bendición y resbale; de más está aclarar que sonrío y soy marqués. Dos metros nos separan. Una tijera y cortadlos, cortadlos, por favor. Unodostrés, unodós, valsífera, ya estás aquí. Urgí. Alzo mi mano al nivel de la tuya, Hola, Alfonso, miras tanto, Cómo está, Larrita, han sido lustros. Oh sos un colibrí, etérea. Ya no hablamos más. Música son tus tacones al golpetear el piso de madera, lírico el retazo de vestido que acaricia mi muslo sin querer. Volcanes down there, Larra, te quiero mía. Te vas. Te sé.

Augurios a priori

Ahora que es dos mil catorce
¿se le ocurrirán estrellas fugaces
al pestilente y seudoprofeta humano
de este divino enredo?
Asimov se cumple
¿acaso pudo habernos
sobrevivido?

ya que
usamos
sus gafas

por qué no.

Off

Take of your shoes
y highway la bahía
la costa repatriada
por el hilo de nuestras uñas
Take off your shoes
qué maldita maraña
no hay policandros
pero nos acribilla la espuma
Take off your shoes
moribundos cangrejos
jazz and eco besadme
urge sobrevivir
mereces más que un barranco
Take off your shoes
and take off your tongue
your eyes our loins our air
la sublime alegría
que me apuñalan tus labios,
take off.

jueves, 2 de enero de 2014

Oscelotes

Porque los globos
también tienen espinas
y un par de oscelotes
se entrecruzan
y paren el más álamo
       engranaje
a fuerza de tuercas
tronar las alas
y dinamitar las entrañas:
the loins, the unanimated soul,
the grass, the knifes, everything.
Fenómenos.

Para leer con los pies descalzos

Mírate, Francovsky. Y mírame a mí. Ambos con las mellizas sonrosadas: el prístino tatuaje del sol que nos une. Mírate: piernas tímidas y desnudas que calzan perfectamente con los cientos de lunares que invaden tu cuerpo, just like I do; tersa frente, como grafito difuminado al mis labios tocar; la antaño Nápoles que es tu vientre; pequeñas orejillas, y ojerillas también; la hermenéutica de descifrar las primeras veces que me ha dado tu circuncidada gloria; la egregia sonrisa que responde a mis disparates; mi tomillo, Francovsky, mi Arcadia. Oh, y ahora que te he reducido al castellano más burdo, ruego que me acaricies con tus vocales.